• EXTRACCIÓN A NIÑOS

    La realización de un análisis clínico es una experiencia singular para los niños. Es importante que se sienta protegido y contenido frente a este tipo de prácticas.

    Además de la preparación previa que corresponde a su análisis, usted puede ayudarlo a prepararse para la extracción de sangre y disminuir sus miedos. La colaboración de los padres es fundamental en la contención afectiva

  • ”¿Cómo

    Habitualmente es mejor brindarles información a los niños. Es mejor si le cuenta de qué se trata y para qué se realiza, es probable que así se sienta menos preocupado.

  • ”La

    Nuestros técnicos extraccionistas están especialmente entrenados para atender niños y generarán un clima relajado. Dependiendo de la edad del niño, utilizarán diferentes recursos para distraerlo durante el pinchazo, con juguetes pequeños que hacen ruido y tienen luces, soplando burbujas, libros o juegos. En muchos casos la compañía de su juguete favorito ayuda al niño, permita que lo traiga. El técnico también le explicará el procedimiento en forma breve, que se trata de una “picadura de mosquito”, que la duración es mínima y que es importante que el brazo permanezca quieto durante la extracción.

  • ”Consultorios

    Algunos de nuestros consultorios tienen una decoración especial para niños. Esto le proporcionará un ambiente más cálido y agradable, en el que encontrará recursos para distraerse.

  • ”Más

    • Evite engañarlo, contarle experiencias negativas o demostrar preocupación o nerviosismo. No vuelva sobre el tema si el niño no insiste.
    • Los niños se sienten mejor cuando creen que tienen un poco de control. Le puede dar opciones, por ejemplo, preguntarle qué quiere llevar al laboratorio, o si prefiere jugar con un juguete o escuchar su cuento preferido mientras le sacan sangre.
    • Hágale saber que es normal que no le guste que le saquen sangre o que lo pinchen. Es bueno dejar que el niño pueda expresar cómo se siente. También es buena idea decirle al niño que el “trabajo más importante” es que permanezca quieto y tranquilo durante el procedimiento y que la razón más importante es su salud.
    • Si el niño se preocupa porque piensa que no le va a quedar suficiente sangre después de la extracción, puede explicarle que la cantidad que le van a extraer es muy pequeña, y que además el cuerpo produce sangre nueva todo el tiempo.